FMI afirmó que Argentina requiere más ajuste para contener la inflación

El organismo lo indicó en un documento en el que atribuye el agravamiento de las perspectivas del país a la vulnerabilidad interna, la incertidumbre sobre las políticas públicas y el deterior del entorno económico.

El Fondo Monetario Internacional (FMI) volvió a pedirle, públicamente, a Argentina que profundice su ajuste; advirtiendo que avanzar en el cumplimiento de las metas fiscales (déficit primario de 2,5% del PBI) y monetario (emisión menor al 1% del PBI) para este año deben ser cumplidas a rajatabla, si efectivamente el gobierno de Alberto Fernández quiere cumplir con el acuerdo de Facilidades Extendidas firmado el 25 de marzo pasado.

En concreto, aseguró este miércoles que «en Argentina, las vulnerabilidades internas y la incertidumbre en torno a las políticas, sumadas a un empeoramiento del entorno externo, están agravando las perspectivas».

Aclaró que la adopción de políticas «más restrictivas» en el marco del programa respaldado por el FMI «será fundamental para apuntalar la estabilidad y contener la inflación», en un contexto en que la inflación «se proyecta que ascenderá a 95% finales de 2022», remarcó el organismo. De esta manera, el FMI refuerza la idea del ajuste como la vía para estabilizar una economía que muestra importantes desequilibrios.

Por otra parte, el Fondo estima que el crecimiento del PIB real se modere a 4% este año, pero los «riesgos a la baja predominan sobre estas perspectivas», consideró. El organismo financiero que conduce Kristalina Georgieva confirma que según las proyecciones del 2022 del organismo la inflación y el crecimiento proyectados se cumplirán sólo si el Ejecutivo sigue al pie de la letra lo que se firmó en el acuerdo

. El diagnóstico se desprende del trabajo elaborado por el departamento del Hemisferio Occidental del FMI presentado esta mañana en sociedad en Santiago de Chile, durante el evento Perspectivas Económicas para las Américas, donde quedó oficializado que el responsable de esa repartición, el brasileño Ilan Goldfajn dejó momentáneamente de lado su trabajo en el Fondo, para ocuparse de su candidatura a la conducción del Banco Interamericano de Desarrollo (BID); algo que se definirá el próximo 13 de noviembre.

En su puesto apareció ayer el director interino Nigel Chalk, el británico que ya había ocupado ese cargo en 2021 cuando Alejandro Werner había dejado el cargo, antes de la llegada de Goldfajn. El documento “Las Américas: Navegando condiciones financieras más restrictivas” menciona específicamente el caso argentino en el siguiente párrafo, publicado en la página 30 del trabajo.

Como primer análisis de los países de la región, el FMI trata el caso argentino argumentando que «las vulnerabilidades internas y la incertidumbre en torno a las políticas, sumadas a un empeoramiento del entorno externo, están agravando las perspectivas». Agrega que «la adopción de políticas más restrictivas en el marco del programa respaldado por el FMI será fundamental para apuntalar la estabilidad y contener la inflación, que ahora se proyecta que ascenderá a 95 por ciento a finales de 2022.

Se proyecta que el crecimiento del PIB real se modere a 4 por ciento este año, pero los riesgos a la baja predominan sobre estas perspectivas». Los próximos pasos en la relación entre el país y el FMI, será trabajar sobre la aprobación de la misión del tercer trimestre del año; algo que debería ocurrir antes que termine noviembre.

La idea del equipo económico de Sergio Massa es que los exámenes continúen de manera virtual, y que sólo al final de los controles, cuando (se espera) el Fondo apruebe las metas y objetivos del período julio, agosto y septiembre; haya algún encuentro personal entre las partes.

Según la visión política del Ejecutivo, los cierres de año no son tiempos de presencias fuertes del Fondo por Buenos Aires. Ya habrá tiempo de poder concretar este tipo de reuniones, al comienzo de 2023.